Estos peques siguen teniendo una sola afición: dormir dormir y dormir. Eso sí, sin que falte la hora de la comilona. Todavía sin ver, es increíble la manera en la que consiguen por instinto moverse buscando algo que llevarse a la boca.
Tendremos que esperar unos días para que los malamutes empiecen a ver, a saborear y a conocer el mundo que les espera. No os preocupéis que os iremos contando con detalle cada uno de sus movimientos.
¿Para muestra un botón verdad? Pues aquí os dejamos un vídeo que os encantará. ¡Nos sigue impresionando lo rápido que crecen estos cachorrines! ¡En nada estarán correteando por aquí! Por supuesto, tendremos reportaje gráfico colgado en nuestro blog.